Aluen CAP y la cura de fin de temporada
Analizamos el ciclo del ácaro y qué pasa en la colmena
«Varroasis» es una enfermedad causada por el ácaro Varroa Destructor . Se reproducen dentro de las celdas y que afecta el normal desarrollo de las abejas, usando como fuente de alimento el tejido corporal de la «pupa». La plaga de origen asiático se ha expandido ampliamente por el mundo, constituyéndose en la mayor amenaza para la rentabilidad de las producciones apícolas.
Ciclo de vida
La reproducción de los ácaros está completamente ligada con el ciclo de vida de las abejas. La varroa hembra se introduce en las celdas, antes de la etapa de pupa (metamorfosis) de las abejas, y es la encargada de comenzar el ciclo reproductivo. Es fácilmente visible, puede medir de 1mm a 2mm y es de color castaño. En cambio, el macho mide menos de 1 mm y es de color amarillo claro.
El ciclo comienza cuando una hembra ingresa en una celda que contiene una larva de abeja de 5 o 6 días. A las 60 horas, la varroa pone un huevo de macho y cada 30 horas pone uno nuevo de hembra. El huevo macho tarda entre 5 y 6 días para madurar mientras que la hembra lo hace a los 7-8 días.
Es el hermano macho quien fecunda a las hembras, que luego serán liberadas cuando la abeja nazca, e irán por busca de nuevas celdas para volver a comenzar el ciclo. La varroa puede llegar a tener hasta 3 (tres) ciclos de reproducción.
¿Cómo se prolifera la enfermedad?
- Dentro de la colmena:
Por contacto directo entre abejas, las varroas se mueven de una abeja a otra y éstas se desprenden para introducirse en las celdas con larvas. - Dentro del apiario:
Por pillaje, cambiando cuadros cuándo se trabaja emparejando cuadros de cría entre colmenas. Así mismo, otro foco de proliferación es a través de los zánganos que buscan una reina virgen o por enjambres silvestres. - De una zona geográfica a otra:
a través de los enjambres comerciales y de la transhumancia.
Ahora… ¿Qué pasa durante períodos donde se corta la postura?
El invierno es el período donde nuestras colmenas se encuentran más vulnerables, por mas que corten su ciclo reproductivo. El descenso de la temperatura del ambiente en ésta estación hace que el aporte de néctar y polen, sea casi nulo.
La varroa reduce el nivel de proteína corporal de la abeja, que es la fuente de las defensas corporales y la reserva de proteína para el desarrollo primaveral. Por eso es muy importante que las abejas que pasarán el invierno, estén sanas, libres de varroa y con las reservas adecuadas.
¿Cómo actúan los tratamientos?
En principio vamos a distinguir los siguientes términos: cuando hablamos de la varroa en estado forético, significa que las hembras de varroa se encuentran fuera de las celdas, buscando otras celdas donde ingresar para continuar con su reproducción. Por otro lado, el término no forético, hace referencia a la presencia de los ácaros dentro de la celda, donde la abeja se encuentra en estado pre-pupa.
Todo tratamiento sanitario, es desarrollado en base al estudio y comprensión de la enfermedad que se desea controlar. Como ya vimos, la etapa reproductiva de la varroa se desarrolla de manera no forética. En el momento que la varroa se encuentra en este estado, la mayoría de los tratamientos no tendrán efecto ya que no están en contacto. Por ende, el momento de óptimo rendimiento es cuando la varroa emerge de las celdas para introducirse en otras, es decir, cuando se encuentren en estado forético.
Esto quiere decir que, mientras la reina mantenga la postura, la enfermedad se propaga y es necesario tratar la colmena. ¿Cuándo?, cuando se encuentre una cantidad considerable de varroa forética para cortar su ciclo reproductivo de la manera mas efectiva. Si se encuentra una baja carga de varroa, quiere decir: o bien que la mayor cantidad de varroas se encuentran en estado no forético (por lo tanto la mayoría de los tratamientos no funcionaría) o aún no se desarrollo lo suficiente la enfermedad para que se justifique un inmediato tratamiento.
En resumen…
Teniendo en cuenta el ciclo de la enfermedad, el de las abejas y el funcionamiento del tratamiento, llegamos a las siguientes conclusiones. Si las colmenas no son tratadas antes de que se terminen los ciclos de cría (y se corte la postura de la reina), el daño sera irreversible y estarán seriamente afectadas para sobrevivir durante los meses de frío y la nula entrada de polen/nectar.
Por ende, resulta importante que el tratamiento sea aplicado con un margen de más de 2 o 3 ciclos de cría. De esta forma, las abejas que nazcan antes del invierno conformaran una colmena sana; lo que significa que estarán en perfectas condiciones energéticas y sanitarias para proteger a la reina y toda la colonia.
Artículo redactado por la Editorial Pampero®.